E l informe semestral de la Secretaría Ejecutiva de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Sudamérica indica un crecimiento líquido de miembros y bautismos en los ocho países atendidos por la sede administrativa responsable de parte del continente (División Sudamericana). Según el boletín, hasta junio de este año el crecimiento real fue de 2.01%. El crecimiento líquido se caracteriza por la diferencia entre el número de personas que ingresaron a la organización adventista por medio del bautismo y profesión de fe y los que dejaron la Iglesia Adventista por abandono de la fe y fallecimiento...
Un grupo de 113,832 personas se convirtió al adventismo y, en el mismo período, 65,297 salieron. A los efectos de comparar, en 2015 (año completo) el crecimiento líquido fue de 4.22% y, en 2014 (año completo) ese porcentaje fue de 3.55%. La comparación proporcional, es decir, el primer semestre de 2016, 2015 y 2014, indica que los números actuales son positivos. En 2015, lo acumulado de enero a junio registró un incremento de 1.96% y, en 2014, ese aumento llegó a 1.68%.
El número de bautismos continúa creciendo, siempre comparando con períodos anteriores. Los datos de la Secretaría Ejecutiva demuestran que durante el primer semestre de este año, hubieron 113,832 bautismos; un 2.5% de incremento en contraste con los 111,055 realizados durante el primer semestre de 2015. Al comparar el primer semestre de 2015 y 2014, el aumento de bautismos fue de 4% y, entre 2014 y 2013 (primer semestre), el número de bautismos presentó un aumento de 9.3%.
Crecimiento con discipulado
El secretario ejecutivo de la institución, pastor Edward Heidinger, explica que por lo menos la mitad de las regiones administrativas adventistas que componen la División Sudamericana ya tienen una actualización completa de sus registros de número de miembros. Sin embargo, aún hay un trabajo administrativo por delante y se está realizando progresivamente. “Estamos seguros de que cuanto más precisos sean los datos estadísticos, más útiles serán en la toma de decisiones”, comenta.
El pastor Erton Köhler, presidente de la Iglesia Adventista para ocho países sudamericanos, evalúa la importancia de destacar que la denominación continúa creciendo. “Si tenemos en cuenta que muchas iglesias están decreciendo en todo el mundo, los adventistas aún estamos bien por la gracia de Dios”, analiza.
Por otro lado, el pastor Köhler puntualiza que los datos reafirman la necesidad imprescindible de un trabajo sólido de discipulado. O sea, en el sentido de no solo contabilizar los bautismos y adhesión de miembros nuevos, sino de fortalecer su compromiso efectivo con la causa de Dios en la Iglesia. “Entendemos que un verdadero discípulo probablemente tendrá menos chances de abandonar la Iglesia. Pero esto significa que tiene mayor comunión con Dios, participa y se relaciona más con los demás y tiene claro su papel en la misión de predicar el evangelio y ejercer el discipulado con relación a otros”, afirma.
Hay dos indicadores que no son totalmente determinantes para un diagnóstico de comunión y relacionamiento de los miembros, aunque pueden ayudar a entender y medir el nivel de compromiso de los miembros en estos dos aspectos.
Según los datos de la Secretaría Ejecutiva, el 56.1% de los adventistas sudamericanos que participan de la Escuela Sabática, o 709,716 personas, afirman que estudian diariamente la lección de la Escuela Sabática, la única guía temática mundial de uso diario que la organización posee. La participación en Grupos Pequeños también es un indicador. De acuerdo a lo informado, existen 61,765 grupos activos en Sudamérica, donde la proximidad entre las personas es mayor y se forman vínculos favorables a una mayor permanencia en la Iglesia.
Fuente: ASN
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